INKO, fabricante malagueño de mobiliario de cocina, avanza en su apuesta por unir diseño, funcionalidad y experiencia culinaria. Lo hace con un proyecto único de la mano del chef Javier Aranda, reconocido con una estrella Michelin. El resultado es una cocina que plasma la naturaleza de Inko y la excelencia gastronómica del cocinero: un espacio donde la precisión técnica, la estética y la profesionalidad conviven en perfecto equilibrio.

Más allá de lo convencional
INKO concibe la cocina no solo como un espacio exclusivo para la actividad culinaria, sino como un entorno vital en el que se coordinan belleza estética, innovación y experiencias personales. En este proyecto, la visión de la firma se mezcla con el perfeccionismo de Aranda para dar origen a una cocina que funciona como una estación de trabajo profesional, pero sin comprometer la calidez ni la elegancia.
La ergonomía y la eficiencia han guiado cada decisión de diseño, pensando en el día a día de quienes disfrutan la gastronomía a un nivel superior. Así, muebles bajos con sistema gola, caceroleros de gran capacidad y cajones interiores en madera de roble son algunos ejemplos que permiten conservar el orden y tener todo al alcance.

El núcleo del espacio
La isla, que se viste de porcelánico Keram 4 de Dekton Marmorio, constituye el corazón de la cocina. Más que como una mera superficie de trabajo, se concibe como un punto de encuentro y pieza escultórica que impera el espacio. Su durabilidad, pureza estética y resistencia, hacen de esta pieza un elemento clave que soporta un uso intensivo sin renunciar a la belleza.

Vitrina Levante
Una de las composiciones protagonistas del proyecto es la vitrina modelo Levante, elaborada en colores cálidos y cristal Parsol bronce. Su interior se ilumina a partir de perfiles LED instalados en los estantes que que brindan profundidad visual y sofisticación. Esta vitrina no es únicamente un elemento decorativo, sino un escaparate para piezas exclusivas que acompañan el universo culinario de Aranda, proporcionando personalidad a todo el conjunto.

Tecnología y estilo al servicio de la experiencia
Aunque el lenguaje estético definan un espacio sobrio y sosegado, el equipamiento camufla soluciones que hacen la vida más sencilla. Entre ellas, enchufes escamoteables, bisagras de 180°, iluminación interior y perimetral con encendido manual, y sistemas de apertura sin tirador, responden a a la filosofía de Inko: que el diseño sea tan inspirador como funcional.
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*Para más información: www.inkococinas.com